Bienvenido, Míster Mao
Über das Buch
Si Europa pudo levantarse después de la Segunda Guerra Mundial gracias al dinero estadounidense del Plan Marshall, bien podríamos decir que hoy es todo el mundo capitalista el que sobrevive gracias a la liquidez de la economía china, lo que se dice todo un Plan Mao. Pasen y vean.
China incrementa a gran velocidad sus inversiones en todo el mundo. Entre acusaciones de «neocolonialismo» y la exigencia de preservar la seguridad nacional, las empresas chinas –públicas en su inmensa mayoría– siguen ganando posiciones en entornos estratégicos, tanto a nivel geopolítico como sectorial. La crisis en los países desarrollados les brinda una oportunidad de oro.
Con unas reservas de divisas estimadas en 4 billones de dólares a mediados de 2014 –la tercera parte del total mundial–, China rastrea el planeta de punta a punta para maximizar beneficios con una visión de largo plazo. Si al principio su inversión se centraba en los recursos energéticos y minerales, ahora busca cada vez más apropiarse también de tecnologías avanzadas y adquirir know how.
A estas alturas de la partida, no es descabellado plantear que serán los chinos quienes llegarán primero a Marte y colonizarán la Luna. ¿Colonizarán también la economía española?