A todos aquellos que se han atrevido a mandarme sus dibujos y obras de arte desde cualquier parte del mundo. Gracias por confiar en mí, ya que sin vosotros este libro no hubiera sido posible.

A la editorial Editatum y a La Orden de Ayala, gracias por confiar una vez más en mí para escribir este libro.

A mis ángeles, que desde arriba me iluminan para seguir cumpliendo sueños.

Sobre la autora

Macarena Arnás es licenciada en Derecho con estudios superiores en Marketing y Comunicación. Grafóloga, perito calígrafo, experta en Técnicas Proyectivas gráficas, coach y escritora.

Su interés por la Grafología surge a los 10 años cuando le regalan un libro sobre esta materia. Fue el embrión para profundizar en dicha disciplina e iniciar los estudios de Grafología, Técnicas Proyectivas y Pericia en el Instituto de Psicografología de Madrid. Tras finalizar sus estudios, crea una nueva cuenta de instagram llamada “La Magia de las letras” (@lamagiadelasletrasoficial) perfil dedicado a la Grafología y Técnicas Proyectivas con el análisis de escritos y dibujos de personajes de interés y trascendencia social.

En el 2017 colabora en distintas publicaciones. En junio del 2019 publica su segundo libro titulado GuíaBurros: Lo que revela tu escritura. En marzo del 2020 su tercer libro GuíaBurros: Lo que revelan los dibujos de tus hijos. Y los tuyos…

Actualmente lleva la creación de contenidos y comunicación online de varias empresas. También colabora como grafóloga en “La Orden de Ayala” impartiendo conferencias y talleres de Grafología y Técnicas Proyectivas en teatros y centros culturales, así como la difusión en varios medios de radio y televisión.

Marzo de 2020 “Un bichito llama a tu puerta”

Sin quererlo ni buscarlo un bichito decidió apoderarse de nosotros, siendo la serendipia que da un respiro al planeta y un sermón a los humanos.

Las calles ya no tienen ruido, los hospitales se colapsan, los colegios cierran, la contaminación se reduce y la vida de muchas personas se apaga...

España decreta el estado de alarma el pasado 14 de marzo del 2020.

99 días confinados en casa, donde los medios de comunicación nos bombardean con cifras que duplican los contagios y las muertes de millones de personas. Sensaciones de incertidumbre, miedo y esperanza se apoderan de nosotros.

Los héroes ya no son Batman ni Catwoman, ahora son los sanitarios y todas esas personas que luchan día tras día para vencer al COVID, a los que animamos con aplausos llenos de luz y pureza en los balcones de nuestras casas.

Quiero recoger la historia de todos aquellos que decidieron crear y expresar todos esos sentimientos que se apoderan de nosotros a través del dibujo.

Garabatos que esconden la verdad de un niño que no sabe expresar con palabras la ansiedad que le genera no poder correr en un parque, la rebeldía de un adolescente que no puede comerse el mundo o la impotencia de un joven que se quedó sin trabajo pero decidió prestarse como voluntario para ayudar a los sanitarios; el amor de un padre que ahora es más rico que nunca porque tiene tiempo para sentarse en el suelo a jugar con sus hijos y la nostalgia de una abuela que anhela poder abrazar a sus nietos.

Las emociones que se graban en un lienzo, las sensaciones que nos empapan ante el caos, la verdad contada desde el corazón…

No sabemos qué será de todo esto; si realmente saldrá una vacuna que pueda acabar con esta pandemia, pero siempre recordaremos esas sensaciones que nos han enseñado el verdadero valor que tiene la vida.

El bichito ha llamado a nuestra puerta y ha entrado, no sabemos cuándo saldrá, pero lo que sí aprenderemos es que ante el caos debemos hacernos más fuertes, más sabios, y sobre todo, más humanos.

El dibujo como herramienta de autoconocimiento “Aprende a conectar con tu niño interior”

Pablo Picasso decía: “Pintar como los pintores del Renacimiento me llevó unos años; pintar como los niños me llevó toda la vida”.

Y pensándolo bien, no le faltaba razón.

Cuando comenzó la pandemia realicé una campaña a través de mi cuenta de Instagram @lamagiadelasletrasoficial para conocer el estado emocional de las personas en estos tiempos de caos. En dicha iniciativa quise recalcar que también podían participar los adultos. Para mi sorpresa, muchos de ellos se avergonzaban de sus dibujos a pesar de que muchas de sus ilustraciones eran una auténtica joya; sin embargo, los niños entregaban con orgullo un simple garabato lleno de expresión y color.

Algunos de esos adultos me dijeron que al volver a dibujar se sentían de nuevo niños, y que además muchos de ellos estaban pasando más tiempo con sus hijos tras el confinamiento, por lo que estaban de nuevo conectando con ese niño interior.

Dibujar es comunicar, es transmitir, es expresar de una manera libre e inconsciente como cuando éramos niños.

A través del dibujo podemos conocer a ese niño interior que permanece escondido en el inconsciente, aquellos sucesos que nos condicionan y esas emociones que guardamos bajo llave.

Tal y como explico en mi libro GuíaBurros: Lo que revelan los dibujos de tus hijos… y los tuyos, para conocer dichas emociones se utilizan las técnicas proyectivas gráficas, una herramienta de evaluación psicológica que nos permite conocer diversos aspectos de nuestra personalidad a través de los dibujos. Las técnicas proyectivas se han utilizado en diversos campos como la psicología, la justicia, la pedagogía, los recursos humanos, etc.

¿Qué podemos conocer los adultos a través del dibujo?

Podemos evaluar la personalidad desde varios aspectos (familiar, emocional, afectivo, etc.).

Conocer el “yo infantil” y sucesos de la infancia que nos limitan o benefician.

El inconsciente.

La proyección de nosotros mismos, cómo nos gustaría ser y la imagen que queremos dar a los “otros”.

Debemos tener en cuenta que a través del dibujo conocemos el estado emocional de la persona en el momento que ha ejecutado el dibujo. El momento presente, el “aquí y el ahora”.

¿Qué rasgos he encontrado en el dibujo de los adultos en tiempos de pandemia?

Por lo general el dibujo de los adultos suele carecer de un excesivo uso de color; sin embargo, en los dibujos de los adultos en tiempos de pandemia predomina un mayor uso del color. Lo que correlaciona con una conexión con ese niño que todos llevamos dentro y una mayor necesidad de expresar nuestro estado de ánimo.

Dibujos de figuras humanas con ausencia de manos y distanciados, lo que refleja de manera inconsciente la falta de contacto social.

Dibujo de una mujer de 29 años, donde se observa la falta de contacto social por la distancia entre las dos figuras y las manos escondidas en los bolsillos, que simbolizan reserva.

Dibujos de figuras humanas con ojos muy marcados o cerrados. El uso de mascarilla nos impide observar otros rasgos faciales como la nariz y la boca, por lo tanto, destacan el gran número dibujos en el que solo aparece la mirada y se enfatizan los ojos. Los ojos, desde el enfoque de las técnicas proyectivas gráficas, se asocian a un deseo de descubrir y conocer todo lo que nos inquieta o rodea.

Obra de la artista Miriam Pablos López, de la cuenta de Instagram @maivonren. Ojos marcados y cerrados que reflejan un deseo inconsciente de no querer ver la realidad; los tonos violetas y rojizos simbolizan necesidad de cambio, revolución y pasión.

Dibujos de casas con corazones como símbolo de amor y protección dentro del hogar.

Dibujo de una mujer de 56 años. Ilustra un corazón en el tejado que revela cariño y afecto dentro de su hogar.

Dibujos en movimiento y de pájaros que simbolizan LIBERTAD.

Obra del artista Fernando Camino, de la cuenta de Instagram @fernando_camino_martin. El pájaro simboliza libertad, pero al estar mirando hacia la izquierda es un dibujo que refleja nostalgia por la autonomía que sentía en tiempos pasados. El contraste de color transmite melancolía, esperanza y duelo.

Dibujos donde aparece el agua. El agua se asocia a las emociones y se interpreta como mayor susceptibilidad y sensibilidad.

Obra “Fluye” del artista José Miguel López Sales (58 años), de la cuenta de Instagram @jomilosa68, en el que predomina el agua como un deseo inconsciente de sentirse dentro del seno materno. Una ilustración que, desde el enfoque de las técnicas proyectivas gráficas, hace alusión a un estado de hipersensibilidad y necesidad de dejarse llevar por el corazón.

Dibujos donde los adultos se retratan en edades inferiores a su edad actual; dicho gesto regresivo indica una conexión con ese niño interior.

Dibujos donde aparecen las palabras “vida” o “muerte”, guardan relación con un periodo de cambio y transición.

Obra “Home” del artista David Arnás, de la cuenta de Instagram @david_arnás, en la que aparece la palabra “muerte”. La ausencia de manos se identifica con la falta de contacto social. Se aprecia una sensación de pérdida, añoranza y abandono.

La sociedad se ha encargado de matar a muchos niños que permanecen en el cuerpo de muchos adultos, niños que saben dar color a un mundo gris, con espontaneidad, sinceridad, y sin dejar de imaginar. A todos esos adultos que se avergonzaban de sus dibujos les digo:

No matéis a ese niño que lleváis dentro; escuchadlo, porque es el único que os dará paz cuando vuestro corazón se encuentre en guerra.

Los niños de la nueva era

“A los niños, antes de enseñarles a leer, hay que ayudarles a aprender lo que es el amor y la verdad”.

Mahatma Gandhi

El 13 de marzo del 2020 diez millones de niños en España se quedaban sin clases. Muchos de ellos abandonaron aquellas aulas pensando que volverían de nuevo al colegio, pero la realidad fue completamente distinta. Los meses iban pasando y los niños permanecían en sus hogares; algunos podían hacer las tareas en su casa a través del ordenador, pero muchos otros no disponían de los medios digitales necesarios para poder estudiar o seguir al resto de los compañeros. En junio del 2020 el curso finalizaba y ellos aún no habían pisado las aulas.

La COVID ha generado un cambio en la educación de los más pequeños, que marcará un antes y un después en las nuevas generaciones. Nos encontramos con una generación que vive en una etapa de cambio constante, niños a los que se les ha dicho que sean más cariñosos, y que de un día para otro se les dice que no pueden dar besos ni abrazos, una generación que estará más concienciada con la salud y con la muerte. Los niños de la nueva era han tenido que aprender a adaptarse a los cambios, quizás van con retraso en el calendario escolar porque no han podido aprender a leer o a multiplicar siguiendo el tiempo que marcaba la ley, pero que han aprendido el valor que tiene la vida, sintiendo de cerca la solidaridad, el amor y respeto.

El confinamiento les ha permitido a los niños tener más tiempo para crear, jugar y dibujar. A través del dibujo los niños se expresan de manera inconsciente.

El dibujo es el lenguaje de los niños; incluso antes de aprender a decir sus primeras palabras, el niño tiene la necesidad innata de comunicarse con un simple garabato.

¿Qué podemos conocer de los niños a través del dibujo?

Evaluar la personalidad a través de varios aspectos.

Conocer el estado emocional de los niños en el momento que han ejecutado el dibujo.

Descubrir cómo percibe un niño a su familia.

El inconsciente.

Las habilidades sociales y capacidades.

¿Qué rasgos he encontrado en el dibujo de los niños en tiempo de pandemia?

Dibujos con combinaciones fuertes de colores.

Niña de 3 años. Se aprecia un contraste fuerte de colores como el verde, el fucsia, el azul, el amarillo y el negro. Tonalidades que transmiten esperanza, miedo y amor.

Dibujos en los que aparecen trazos coloreados en zigzag como consecuencia de un estado de nerviosismo y ansiedad.

Joven de 17 años. Colorear en forma de zigzag indica nerviosismo y ansiedad. La ansiedad es miedo al futuro, sensación que aparece con frecuencia en los dibujos en tiempo de pandemia.

Dibujos de arco iris. Símbolo de positividad ante las situaciones complicadas.

Leo, 4 años. El arco iris es uno de los elementos que más aparece en los dibujos realizados durante la pandemia. Un elemento que refleja optimismo a pesar del dolor y la incertidumbre del momento.

Dibujos de mascotas. El confinamiento ha permitido pasar mayor tiempo con las mascotas. Cuando aparecen animales en los dibujos infantiles y el niño no tiene mascota, refleja una necesidad de protección y afecto dentro del hogar.

Niña de 5 años. Dibujo de un gato con colores poco convencionales. La combinación del color verde y rosa simboliza esperanza y necesidad de afecto. La omisión del cuerpo, junto a unos ojos de gran tamaño, indican sensibilidad e imaginación.

Dibujos en sentido regresivo. Las figuras están mirando hacia la zona de la izquierda del papel, zona asociada al hogar y al pasado.

Lucas, 6 años. El gato está mirando hacia la zona de la izquierda, lo que revela un mayor contacto con la familia y un mayor apego a la figura materna.

Dibujos de héroes. Los héroes juegan un papel importante en los dibujos de los niños en tiempos de pandemia. Los niños necesitan referentes a los que admirar, y esa necesidad se pronuncia cuando pasan por un momento de cambio o incertidumbre como el confinamiento.

Joaquín, 13 años. Ilustración en la que se menciona a varios héroes acompañados de frases que invitan a la prudencia y el cumplimiento de las medidas sanitarias.

Dibujos con caminos curvos y riachuelos, como símbolo sensibilidad e inestabilidad ante el caos.

Martín, 9 años. Aparece un camino que se bifurca en varias direcciones, acompañado de formas curvas y tonos azulados. Refleja dudas e indecisión. El sol se asocia al padre, al cual percibe como un punto de apoyo. Las montañas indican sueños y metas a largo plazo, lo que revela que, a pesar de la incertidumbre, siente protección y motivación dentro del hogar. El tono azulado refleja que Martín es sensible e idealista.

Dibujos con palabras positivas como símbolo de optimismo.

Niña de 9 años. Dibujo donde se proyecta con flores, lo que refleja coquetería y optimismo. No obstante, al estar caminando hacia la izquierda (de nuevo en sentido regresivo) indica ese mayor apego al hogar, a la familia y un menor vínculo con la parte social.

Dibujos con palabras de precaución como reflejo de conciencia social en la Tierra.

Nico, 12 años. Palabras de conciencia social para cumplir las medidas sanitarias. De nuevo aparece esa llamada a la responsabilidad social por parte de los más pequeños.

Durante el confinamiento recibí numerosos dibujos de niños, pudiendo comprobar la capacidad de esperanza, adaptabilidad y optimismo en momentos de caos. Los niños son grandes maestros que tenemos a nuestro alcance, y que han dado un ejemplo a muchos adultos sobre el cuidado que debemos tener en situaciones complicadas, sin caer en la negación y el victimismo.

Sie haben die kostenlose Leseprobe beendet. Möchten Sie mehr lesen?