Buch lesen: «Libélula Contra Monarca»
Libélula contra Monarca
Libro Dos
por
Charley Brindley
charleybrindley@yahoo.com
www.charleybrindley.com
Editadopor
Karen Boston
Página Web https://bit.ly/2rJDq3f
Arte de la caratula por
Charley Brindley
Arte de la contraportada por
Niki Vukadinova
Traducido al español
por
Eduardo Olavarrieta
© 2019 Charley Brindley, todos los derechos reservados.
Impreso en Estados Unidos de América
EdiciónPrimera 29 de Mayo de 2019
Este libro está dedicado a
Seth Alva Walker
Algunos de los libros de Charley Brindley han sido traducidos a los siguientes idiomas:
Italiano
Español
Portugués
Francés
Chino
Y
Ruso
Otros títulos de Charley Brindley
1. La Fosa de Oxana.
2. La última misión de la séptima caballería.
3. Raji Libro Uno: Octavia Pompeya.
4. Raji Libro Dos: La Academia.
5. Raji Libro Tres: Nefasta Kawa.
6. Raji Libro Cuatro: La Casa del Viento del Oeste.
7. La Chica Elefante de Hannibal.
8. Cían.
9. Ariion XXII .
10. El Último Asiento en el Hindenburg.
11. Libélulacontra Monarca: Libro Uno.
12. El Mar de la Tranquilidad 2.0 Libro Uno
13. El Mar de la Tranquilidad 2.0 Libro Dos.
14. El Mar de la Tranquilidad 2.0 Libro Tres.
15. El Mar de la Tranquilidad 2.0 Libro Cuatro
16. Mar de los Pesares
17. No Resucitar.
18. La Chica Elefante de Hannibal, Libro Dos
19. La Vara de Dios, Libro Dos.
20. Incubadora de Qubit
21. Henry IX
22. El Juego de Casper
Próximamente
23. Libélula contra Monarca: Libro Tres.
24. El Viaje a Valdacia.
25. LasAguas Tranquilas Corren Profundo.
26. Srta Machiavelli
27. Ariion XXIX
Ver final de este libro para más detalles sobre los otros.
Contenido
Capítulo primero
Capítulo segundo
Capítulo tercero
Capítulo cuarto
Capítulo quinto
Capítulo sexto
Capítulo séptimo
Capítulo octavo
Capítulo noveno
Capítulo décimo
Capítulo Primero
La CIA no es la única pandilla deagentes secretos con insectosdotados dearmas. Parecer ser que el Kremlin tiene los suyos también.
Ciudad de Nueva York, hoy.
Rigger Entime tocó a la puerta del apartamento 7C.Mientras esperaba, divisó bajando del elevador al final del pasillo, a una pareja risueña que le daba la espalda.Panoramas pintorescos, y mesitas elegantes con jarrones de flores decoraban el pasillo curvo.
“Te tardaste demás.” Sonrió Katrina mientras abría la puerta.
“Hubiese llegado antes pero…”
“Calla.”
Deslizó sus brazos por su cuello y presionó sus labios con los de él. La bolsa de papel que portaba la golpeó en el trasero al rodearla con sus brazos, mientras cerraba la puerta de una patada.
“Mmm… me parece que trajiste algo duro contigo.”
“Si.” La besó de nuevo. “Licor duro.”
“¿Eso también?”
Tras un momento se apartó de él “¿Hambriento?”
Negó con la cabeza y la besó de nuevo.
Alcanzó detrás de sí misma y le quitó la bolsa de sus manos. “Quiero ver qué me has traído.” Abrió la bolsa y revisó dentro. “Amo el tinto de verano”
“¿Dónde está Rachel?”
“En el orfanato.” Lo tomó de la mano, guiándolo hacia la cocina.
“Desearía que estuviese aquí.”
“Yo igual. La quiero tanto” Katrina dejó las botellas en la mesa de la cocina. “Siéntate acá.” Dijo apuntando a una silla de la mesa, mientras se ponía un guante de cocina. “Nos hice pizza.”
“Woao, huele muy bien. Tal vez si tenga hambre.”
Puso la pizza sobre la estufa y la separó con el cortapizzas. Después de cortar 4 trozos y ponerlos en un plato se sentó en una silla de la mesa frente a él.
“¿Por dónde comenzamos?” preguntó ella.
Tomó un pedazo de pizza y lo dejó inmediatamente. “Usualmente comienzo con los dedos, pero está demasiado caliente”
“Sabes a lo que me refiero.” Corrió su silla hacia afuera y se acercó a la gaveta por dos tenedores. En vez de volver a su silla frente a él, se sentó en otra, a su lado.
Cada uno usó su tenedor para cortar un bocado de pizza.
“¿Por qué te han despedido?” preguntó él.
“Para comenzar, dormir con el enemigo, lo cual no hice.”
“¿Y qué más?”
“Poner en peligro a un menor.”
“Pues, eso es cierto, si pensaste que yo pudiese ser un asesino.”
“Ja, no sabes lo cerca que estuviste de una bala.”
Rigger paró de masticar para verla fijamente.
“¿Recuerdas ese primer día, cuando nos compraste chocolate caliente?”
Él asintió con la cabeza.
“¿Notaste mi mano derecha en algún momento? No, no lo hiciste, ya que estaba dentro del bolsillo de mi saco, junto a mi revolver de servicio; el cual por cierto, tuve que entregar hoy.”
“¿Me estabas apuntando con una pistola??”
“No apuntando precisamente, pero pude haberla tenido en mi mano en solo un instante si nos hubieses hecho una avanzada. Al igual que la vez que pensabas que estaba limpiando tu cocina, tuve mis ojos sobre ti todo el rato que jugabas con Rachel.”
“Pues…” Rigger regresó a su comida. “Pensé entonces, que eras una doméstica terrible.”
“Tenía tantas ganas de arrestarte, pero no tenía evidencia alguna, nada para mostrar en la corte.”
“’¿Cuándo te comenzaste a ablandar conmigo?”
“La segunda vez que Rachel y yo fuimos a tu apartamento. Comencé a notar que eras un buen tipo.” Katrina retiró las tapas de las bebidas y puso una frente a Rigger.
Rigger tomó un trago. “Y supongo que le reportaste de vuelta a tu superior que ya no era un sospechoso?”
“Si, eso hice. Pero el capitán Billingsley no se lo creyó. Dijo que me estaba poniendo cómoda contigo y que debía apartarme por un tiempo, hacer papeleo o poner multas de tránsito.”
“Pero eso no fue lo que hiciste.”
“¿Cómo podría?”
“¿Fue él quien te despidió?”
“Si. No me despidió per se, me suspendió hasta que asuntos internos complete su investigación. Creo que fue el tercer punto de su lista lo que más le molestó.”
“¿Y cuál era ese punto?”
“Insubordinación y no seguir procedimientos del departamento.”
“Esos son dos puntos.”
“Y el término ‘impredecible’ fue traído a acotación, más de un par de veces.”
“Suena a que estaba realmente fastidiado contigo, pero no puedo imaginarte desobedeciendo.” Rigger ojeó la cocina, se levantó y alcanzó dos servilletas de papel de un rollo situado junto al fregadero. Le entregó una a ella y utilizó la otra para limpiar su boca.
“Oh no, sí fui desobediente, eso es seguro; y también me negué a dejar de verme contigo.”
Él volteó para hacerle frente. “¿Y valió la pena?”
Katrina detalló su trozo de pizza por un momento. “Aún no.” Dio una mordida.
“Qué linda eres. ¿Nos vamos a emborrachar o qué?”
“Que.”
Rigger dejó a un lado su bebida y acercó a Katrina a sus brazos. Besó sus labios, mejilla, oreja, luego su cuello. Cuando trató de deshacer el botón superior de su blusa, ella dejó caer su botella. La misma golpeó en la mesa y se cayó de lado, derramando la bebida color rosa. Ninguno pareció notarlo.
Empujó su pizza de lado y levantó a Katrina, sentándola sobre la mesa frente a él. Ella separó sus piernas, mientras él presionaba un lado de su rostro en su pecho. Cuando Rigger envolvió sus brazos alrededor de ella, Katrina lo abrazó por el cuello y recostó su mejilla en su pelo.
“Rigger,” susurró.
“¿Dime?”
“¿Por qué está mojado mi trasero?”
Bajó su mano hasta el trasero de ella, y luego a la sobremesa. “Es tinto de verano,” dijo él, sin moverse de posición.
“Oh. Dios.”
“¿No crees que deberías cambiarte esos jeans?”
“Aquí no.”
“¿Dónde sino?”
“En el cuarto.”
“¿Tienes un cuarto?”
Se inclinó hacia el frente, alejándose de la mesa y sentándose en el regazo de él, cubriéndolo con sus piernas.
Al besarlo, él pudo sentir su lengua acariciar sus labios. Separó sus labios para recibir los de ella y sus lenguas se encontraron.
“Kat,” susurró.
“¿Si?”
“Ahora son mis pantalones que están mojados.”
Katrina rió, inclinándose hacia atrás “¿Trajiste un cambio?”
Él negó con la cabeza.
“¿Ves esa puerta?” preguntó ella.
“No.”
“Abre tus ojos.”
“Ah, te refieres a la puerta con la señal titilante de neón que lee ‘¿cuarto, cuarto, cuarto?’”
“Sí, sí, sí.”
Rigger la cargó hasta el cuarto, sentándola sobre la cama, y mientras, la miraba deshacer el cierre de sus jeans.
Katrina no se quitó los jeans, en vez, deshizo los botones de su blusa, mirándolo fijamente. Al alcanzar el último botón, dijo, “¿Quieres conocer a Thelma y a Louise?”
Los ojos de Rigger se dilataron al ver su brasier Rosado de encaje. Asintió sin quitar su mirada de ella.
Katrina se quitó la blusa y la dejó a un lado, mientras alcanzaba el gancho de su sostén, tratando de removerlo.
“Nunca…”Se detuvo, tragó, y parpadeó. Trató de decirlo de nuevo “Nunca conocí a una mujer que nombrara sus senos.”
“Esas no son Thelma y Louise, tonto. Son estas.” Su brasier cayó al suelo y con sus brazos en cruz sobre su pecho, hizo aparecer dos pequeñas pistolas de envainaduras de cuero fijadas a su espalda baja.
“¡Woao!”
Hizo piruetas con sus automáticas niqueladas en las puntas de sus dedos índices, manteniendo sus ojos fijos firmes en los de él. “El Capitán Billingsley no sabe sobre estas bebés.”Lanzó su pistola derecha por el aire y la atrapó detrás de su espalda. “¿Dónde está Thelma?”
Rigger echó un vistazo a la mano izquierda, la cual ella apuntaba hacia él, con la palma abierta y vacía.
“Desapareció.”
“¿Dónde está Louise?”
Era su mano derecha que estaba vacía ahora. Unió sus manos a lo alto sobre sí misma y serpenteó su cuerpo.
Rigger no pudo contener una sonrisa. Observó sus caderas mecerse y sus hermosos senos sacudirse.
Bailaba frente a él, y luego lentamente volteó su cuerpo, hasta que su espalda lo enfrentaba. Se inclinó hacia adelante.
“¡Thelma y Louise!” Dijo con un grito al ver las dos pistolas que salían a medias dentro de los bolsillos en las caderas de Katrina.
“Puedes tocarlas si gustas.”
Trató de tomar las pistolas bamboleantes, pero ella giró rápidamente, tomándolo de las manos.
Se quedó perplejo mirándola de frente.
“Mejor nos quitamos esta ropa mojada.” Dijo ella.
“Ven, deja que te ayude.”
* * * * *
Tarde la mañana siguiente, Rigger y Katrina, estaban parados en el pasillo frente a su apartamento. La trajo a sus brazos y la besó. Ella se acercó, pasando sus manos alrededor de su cadera.
“¿Tienes hambre?” susurró Rigger en la proximidad de su oreja.
“Ajá.” Lo miró. “¿Hueles donas?”
Él trató de reconocer el aroma en el aire.
“No, ¿tú sí?” Buscó sus llaves en sus bolsillos para abrir, pero Katrina forcejeó la puerta - esta abrió.
Entraron y encontraron a Pug y Autumn sentados juntos en el sofá. Y una caja de donas Krispy Kreme reposando sobre la mesa ratonera.
“Rig!” Pug saltó directo a sus pies. “Estábamos preocupados por ti.”
“Si, eso puedo ver.”
“¿Dónde han estado?” Preguntó Autumn.
“Em…” Dijo Katrina, “por ahí.” Observó a Rigger y sonrió.
“Ah,” dijo Autumn contenta, “¿es el ‘por ahí’ que creo que es?”
“Olvídenlo,” dijo Rigger. “Espero que hayan disfrutado de mi apartamento.”
Agarró una dona rellena de crema y se la entregó a Katrina, luego tomó otra más para sí mismo. Ambos de sentaron en el sofá de dos.
“De hecho,” dijo Autumn, “nos hemos estado divirtiendo un poco.” Miró a Pug.
“¿La misma ‘diversión’ que creo que es?” Katrina alcanzó una servilleta para limpiar sus labios.
“Ja,” rió Pug ,“incluso mejor.”
Autumn le dio un codazo a Pug en las costillas mientras le hablaba a Rigger. “Rig, ¿Usas Twitter, o tuiteas?”
Rigger masticó y tragó su dona. “Si, yo tweeteo y pío también.”
“Bien.” Autumn levantó su móvil de la mesa. “Mira esto”. Presionó un botón en su nuevo Galaxy, y luego tipeó un número con su pulgar.
Rigger limpió sus manos con una servilleta y tomó su móvil de su bolsillo. Observó la pantalla. “¿Deberíamos estar tuitereando en este momento?”
Pug se acercó a Autumn, viendo la pantalla en el teléfono de ella.
Ella ojeó a Pug y alzó un hombro.
“Ahora escribe dos-d-dos,”dijo Pug.
Eso hizo, y luego ambos sonrieron cuando el resultado apareció en la pantalla.
“¿Aún no recibí ningún twitter?” dijo Rigger.
Autumn apuntó con su quijada hacia las escaleras, los cuatro miraron en esa dirección.
Tras un momento, una pequeña criatura apareció a la vista al tope de las escaleras, revoloteando cerca del techo.
“¡Donovan!” gritó Rigger.
“¿Donovan?” preguntó Katrina.
Autumn regresó su atención a su celular, mirando la pantalla en tanto inclinaba su dispositivo para controlar la diminuta Libélula. La silenciosa criatura, se movió hacia adelante bajando por las escaleras. Al llegar al fin de la misma, Donovan volteó y aleteó de lado hasta estar tan solo unos centímetros del risueño Rigger.
“Hermoso,” susurró Rigger. “¿Pero cómo— ”
Repentinamente, las alas de Donovan fallaron, y cayó varios centímetros.
Pug estiró su mano con la palma abierta, frente a Autumn. “Hazlo bajar”.
Autumn cliqueó un botón y luego otro.
Donovan aterrizó en la mano de Pug.
Autumn lo apagó, y las alas quedaron en paz.
“¿Qué es esa cosa?” preguntó Katrina.
“Shhh,” dijo Autumn, y bajó su tono de voz. “Es el Proyecto secreto de Rigger.”
“¿Ese insecto tan pequeño?”
Rigger alcanzó la diminuta Libélula de la mano de Pug. “Ese pequeño insecto de siete millones de dólares,” dijo. “Pero ya no es tan secreto.” Mirando a Autumn preguntó. “¿Cuánto tiempo de vuelo obtuviste de la batería?”
“Casi dos horas.”
“Nada mal, ¿Pero cómo lo controlaste con tu móvil?”
“Donovan tiene su propio teléfono ahora.” Dijo Pug.
“Conseguimos el teléfono anoche,” dijo Autumn. “Y luego Pug lo jaqueó y conectó a tu caja de control que tienes arriba. Codificó una app desde mi Galaxy, utilizando su acelerómetro y giroscopio para controlar los movimientos de Donovan. Ahora lo único que debemos hacer es llamar a su número, ingresar algunos códigos ultra secretos, y recibimos audio y video desde el dispositivo controlador. Todo lo que debes hacer es mover tu móvil en la dirección a la que quieres que vaya.”
“¿En serio?” preguntó Rigger. “¿Y podría hacerlo desde el mío?”
“Pues, Donovan tiene un número privado.”
“Genial, los chicos de la CIA se volverán locos son esto.”
“Tal vez les demos su número.” Autumn le sonrió a Rigger. “¿Listo para anotarlo en tus contactos?”
Rigger asintió, y Autumn le leyó el número. Él lo agregó a su lista de contactos.
“Debe descargar la app,” Dijo Pug.
“Okey.”
Pug le dio las instrucciones.
Rigger llamó al número de Donovan. “¿Contraseña?”preguntó.
“Mando,” dijo Autumn.
Rigger tipeó la contraseña. “Oye, mira esto, Kat.” Apuntó su pantalla hacia ella para que pudiese ver lo que hacía.
“Efectivamente, allí están Autumn y Pug, sentados uno al lado del otro” dijo Katrina. “¿Dónde está la cámara?”
Pug apuntó a Donovan hacia Rigger y Katrina. “Dos diminutas cámaras de video hacen las veces de ojos.”
“Funcionan muy bien para ser tan pequeño,” dijo Katrina.
“Así es,” dijo Autumn, “pero transmitir el video a la caja de control de arriba drena la batería.”
“Tipéa uno-h-uno,” dijo Pug.
Rigger escribió el comando y la cámara se apagó.
Pug acercó a Donovan hasta Autumn y lo mantuvo estable para ella .
Autumn removió la batería vieja de la Libélula de un compartimiento en su vientre e insertó una con carga. “Le soldamos un recipiente de batería en el estómago para que fuse más fácil reemplazarlas.”
“Buena idea,” dijo Rigger.
“Okey,” dijo Autumn. “Llama a su número de nuevo.”
Rigger marcó el número en tanto Pug ponía la Libélula sobre la mesa.
Tras conectar la llamada correctamente, Rigger recibió la señal de video de Donovan en la pantalla de su móvil. “¿Y ahora qué?”
“Espera un minuto,” dijo Autumn, “no va a funcionar con su celular. Debe ser al menos un modelo Galaxy-S5, porque cuenta con sensores de inclinación.”
“Cierto,” dijo Pug. “Rig, tendrás que conseguirte un teléfono nuevo. Pero por ahora, utiliza el de Autumn.”
“Vale, me compraré uno nuevo hoy más tarde.”
Autumn le entregó su celular a Rig.
“Marcados-d-dos,” dijo Pug. “Luego lo controlas inclinando hacia enfrente, atrás, a la derecha o izquierda.”
Pronto, las alas de Donovan comenzaron a revolotear y se elevó de la mesa.Dio una lenta vuelta en círculo en tanto se elevaba al techo.
“Esto es mucho mejor que esos dos joysticks que usábamos antes,” dijo Rigger. “¿Cuál es el rango?”
“Esta mañana logramos que llegara hasta la cocina,” dijo Autumn.
“Abre la puerta de la entrada,” dijo Rigger.
Pug fue y abrió la puerta, mientras Rigger maniobraba a Donovan en dirección al pasillo. Hizo a la Libélula cruzar a la izquierda, viendo la transmisión de video en su móvil.
“Síguelo, Pug,” dijo Rigger. “Veamos qué tan lejos puede llegar.”
“Okey,” dijo Pug. “Oye, alguien está bajando del elevador.”
Rigger ojeó el video y elevó a Donovan más cerca del techo del pasillo, donde lo cambió a modo sobrevolar. “Vamos a ver si lo notan,” dijo Rigger a Autumn y Katrina.
Un hombre y una chica salieron del elevador, entrando al pasillo y divisando un Pugsley sonriente. Rigger hizo rotar a Donovan para mantener a la pareja en el video. No notaron al pequeño insecto en ningún momento.
La pareja entró al apartamento frente al de Rigger; en tanto, Rigger conducía a la Libélula por el pasillo más allá del elevador, y Pug le seguía. Unos metros después de los elevadores la señal de Donovan comenzó a disminuir.
Rigger movió la pequeña aeronave de regreso al apartamento.
Autumn se acercó a la puerta. “¿Dónde dio la vuelta?” le preguntó a Pug.
“Unos diez metros más allá de los elevadores,” dijo Pug.
“Y tal vez veinte metros de aquí hasta los elevadores,” dijo Autumn. “Y agregamos veinticinco metros, más o menos, hasta la caja de control arriba en el cuarto. Su rango es de unos 50 metros. Nada mal para un pequeño bicho como éste.”
Pug siguió a Donovan de regreso adentro. “Si pudiésemos cambiar a una frecuencia más alta, creo que podemos mejorar el rango.”
Rigger bajó a Donovan a las manos abiertas de Katrina. “Es un pequeñín muy adorable,” dijo ella. “¿Pero para qué lo necesita la CIA?”
“Va a ser llevado a un área en particular por un Dron más grande,” dijo Rigger, “para ser liberado en los alrededores de una zona de misiles o un campo de entrenamiento de terroristas. La teoría es que nadie le va a prestar atención a una Libélula revoloteando por ahí. Su audio y video serán transmitidos por medio de la nave nodriza circulando a lo alto, y desde allí, directo a cuartel general.”
“¿Qué sucede si se acaba la batería mientras esté en su misión espía?”
“Cuenta con un dispositivo incendiario que se activará automáticamente cuando muera la batería,” dijo Rigger. “Pero si logra acoplarse a la nave nodriza antes de quedarse sin energía, el incendiario se desactiva.”
“Qué mal que no tenga un pequeño subfusil,” dijo Pug.
“Em…”
“No me digas que le pusiste un arma.” Dijo Katrina mirando la Libélula en el vientre.
“No,” dijo Rigger. “Pero estoy trabajando en una.” Miró a Autumn.
Autumn dijo riendo. “¿Implica a un pez carnívoro o baba de sapo venenoso?”
“Baba de sapo.
* * * * *
“¿Puedo preguntarte algo, mamita?” preguntóKatrina, sentadas en la sala de estar de Rigger, en tanto Rigger, Autumn y Pug se encontraban arriba trabajando en la Libélula.
“Ajá,” respondió Rachel mientras jugaba con Henry, su muñeca Barbie.
“No tienes que decirme nada si no quieres, bebé, pero sabes que soy policía, y realmente me gustaría descubrir quién le hizo mal a tus padres.”
Rachel dejó de jugar con la muñeca, bajó la mirada al piso y negó con la cabeza.
“Está bien. No tienes que hablar al respecto. Ven aquí y dame un gran abrazo.”
Rachel dejó su muñeca y subió al regazo de Katrina. Esta sostuvo a la niña en brazos, reposando su mejilla en la cabeza de Rachel.
“Te amo, Rachel.”
“También la amo, Srta. Kat.”
Estuvieron en silencio por un rato, y entonces Rachel dijo, “Aún tengo sueños feos.”
“Lo sé, dulzura.”
“En el orfanato, a veces despierto llorando en la noche, y la Sor me deja dormir con ella.”
“Te agrada Sor Suzanne?”
Rachel sintió.
“A mí también me agrada. Es muy buena.”
“¿Por qué le hicieron eso a mi mamá y a mi papá?
“No lo sé, pero la primera cosa que preguntaré cuando les atrape es porqué lastimaron a los padres de mi mejor amiga.”
“¿Y qué harás con ellos?” Rachel miró a Katrina.
Katrina tragó fuerte. Tras un momento, dijo, “Los voy a meter en prisión por un largo, largo tiempo. Los encerraré en un hueco infestado de ratas y arañas.”
Rachel sonrió y descansó su cabecita en el pecho de Katrina. “El hombre tenía una cosa fea en la cara.”
Katrina aguardó, dejando a la niña seguir a su propio ritmo.
“Bailaba chistosamente, actuando como la mujer, pero él, no tenía un cuchillo como ella. Y cada minuto hacía esto…” Rachel se alejó del regazo de Katrina, y parada frente a ella hizo un movimiento con sus codos.
“¿Qué?” preguntó Katrina, inclinando su cabeza a un lado. “¿Qué fue lo que hizo?”
“Hizo así.” Rachel presionó sus codos a su cintura y después los elevó.
“Espera un minuto.” Katrina se puso de pie e hizo el mismo movimiento. Encontró que sus codos tocaban la pretina de sus jeans, y al levantar los brazos, se elevaban también sus jeans. “¿Como si estuviese levantando sus pantalones con los codos?”
“Si, así.” Rachel lo hizo de nuevo. “Y lo hacía todo el tiempo. Bailando por ahí y luego se subía el pantalón.”
“Qué extraño.”
“Ya no quiero hablar de eso.”
“Ni yo,” dijo Katrina. “Vayamos a comenzar la cena para Rig, Autumn y Pug. Apuesto que tienen hambre.”
“Okey.” Rachel corrió hacia la cocina.
* * * * *
La noche del miércoles, después de dormir a Rachel, Katrina, Pug, Autumn y Rigger estaban sentados en la mesa del comedor.
Katrina le pidió a Pug que mostrara el video que había grabado en Central Park.
“Seguro, solo me tomará un minuto configurarlo.”
“Pug hace videos?” preguntó Autumn.
“Un tipo le estaba haciéndole seguimiento a Rigger, y Pug lo atrapó con la cámara de su móvil cuando Rigger paseaba a Wolf por Central Park.”
“¿Por qué te están persiguiendo, Rigger?” preguntó Autumn.
“No tengo idea. Al principio pensamos que estaba conchabado con Kat.” Rigger tomó la mano de Katrina. “Pero luego descubrimos que ella no lo conocía.”
“¿Por qué pensarían eso?” preguntó Autumn.
“Ellos pensaban que yo era alguien que no soy,” dijo Katrina.
“Pero si eras alguien que no eres,” dijo Rigger, con una sonrisa.
“No, siempre he sido yo. Pero no estoy segura de tí.”
“Okey, ustedes dos. Ahora estoy totalmente confundida,” dijo Autumn.
“Listo para correr el video,” dijo Pug.
Los cuatro vieron el video con el sujeto siguiendo a Rigger y Wolf.
“Por Dios,” dijo Autumn. “Qué tipo tan feo.”
“Exactamente mí mismo comentario,” dijo Katrina.
Observaron por un momento, luego Katrina dijo, “Es él.”
“¿Quién?” preguntó Pug.
“El tipo que ayudó a matar a los padres de Rachel.”
“¿Cómo lo sabes?” preguntó Rigger.
“Notaron como se sube los pantalones con sus codos constantemente?” preguntó Katrina.
“¿Eso es lo que está haciendo?” preguntó Autumn.
“Si, es algún tipo de hábito nervioso,” dijo Katrina.
“Qué raro,” dijo Pug. “¿Pero lo convierte eso en el asesino?”
“Rachel me dijo que él hacía eso todo ese tiempo mientras la mujer cortaba a sus padres. Dijo que bailoteaba y no dejaba de subir sus pantalones con sus codos. Incluso me demostró cómo él lo hacía.” Katrina apuntó con la cabeza al monitor. “Exactamente como lo está hacienda. Si lo podemos encontrar, podemos encontrar también a la mujer.”
“Así que por eso es que Rachel gritó la otra noche al verlo en el video,” dijo Rigger. “Lo reconoció.”
“¿Pero por qué te está siguiendo, Rigger?” preguntó Autumn.
“No tengo idea.”
* * * * *
Rachel estaba sentada junto a Autumn durante la cena. “¿Dónde está tu gran avión?” preguntó Rachel.
“En el aeropuerto.”
“¿Subiste hoy al cielo?”
“Nop. Los técnicosestán trabajando en el tren de aterrizaje, así que no podré volar por un día o dos.” Autumn sacósu móvil del bolsillo y lo puso sobre la mesa entre sus dos platos de comida. “¿Quieres ver algo?”
Rachel asintió.
Autumn marcóel número de Donovan. “Observa la pantalla.”
Rachel se inclinó más cerca de Autumn para ver la pantalla.
Autumn introdujoel código para iniciar la Libélula, y entonces la pantalla encendió.
“¿Qué es eso? ” preguntó Rachel entrecerrando sus ojos como para reconocer algo en la pantalla.
“Aguarda un segundo” Autumn rotó el teléfono para levantar a Donovan de la mesa del cuarto de arriba. Y observando la pantalla, lo maniobró en dirección a la puerta. “Jumm… alguien…” miró a Pug, “…cerró la puerta.”
“Oh, oh.” Pug corriósu silla hacia atrás y se apresuró por las escaleras. Un momento después, Rachel y Autumn vieron la puerta abrirse y a un sonriente Pugsley aparecer en la pantalla.
“Holi,” dijo Rachel. “Es Pug en tu celular.”
“Sip, ese es nuestro querido amigo Pug.” Autumn voló la Libélula pasando a Pug en dirección al pasillo.
“Y ese es el salón de arriba,” dijoRachel.
Rigger ojeó a Katrina y le dio un guiño.
“¿Qué ves ahora?” preguntó Autumn.
“La parte superior de las escaleras.” Rachel se deslizóde su silla y corrió a las escaleras. Los otros siguieron, con Autumn aun trabajando en los controles.
A lo más bajo de los escalones, Rachel vio en lo alto a la extraña criatura sobrevolando. “¿Ese es un bicho?”
“Ajá,” dijo Autumn. “Pero él es un bichito muy astuto. Salúdalo.”
Rachelsaludó con la mano y Autumn usó su celular para mecer laLibélula de atrás a adelante.
Rachel gesticuló para hacerlo bajar,y Donovan revoloteósu camino hasta el fin de las escaleras.
“Sostén tus manos abiertas,” dijo Pug desde arriba.
Rachel abriósus manos, juntas frente a ella, y Donovan descendió flotando para reposar sobre ellas.
Autumn lo apagó.
“Es muy adorable.” Rachel dijo observando a la pequeñacriatura. “¿Cómo lo atraparon?”.
Se rieron.
“Rigger lo creó,” dijo Katrina.
Rachel miróa Rigger con sus ojosdilatados. “¿En serio?”
“Pues,” dijo Rigger, “Tuve muchísima ayuda de la Srta. Autumn y Pug.”
Rachel soplósobre la Libélula. “Desearía saber cómo hacerlo volar”
Autumn miró a Rigger. El levantó un hombro.
“Creo que tienes que susurrar las palabras mágicas. ” dijo Pug bajando los escalones.
“¿Qué palabras mágicas?” preguntó Rachel.
Pug se acercó y susurró algo al oído de Rachel.
“¿Ah?”
Este susurróde nuevo.
Rachel dejósalir una risita. “Okey, veremos.” Elevósus manitas un poco más alto y dijo, “Hokey Pockey, canela y pastel. Aquí viene el Oso, vuela así.”
Autumn marcóel código de inicio, y Rachel se quedó sin aliento cuando las alas de Donovan se comenzaron a mover. Se elevó y subió hasta el techo, donde voló en círculos.
Der kostenlose Auszug ist beendet.