Persona, Sociedad y Estado en Jaime Guzmán

Text
0
Kritiken
Leseprobe
Als gelesen kennzeichnen
Wie Sie das Buch nach dem Kauf lesen
Schriftart:Kleiner AaGrößer Aa

1) NATURALEZA SOCIAL

LA PERSONA ES SUPERIOR Y ANTERIOR AL ESTADO

“La concepción del hombre y la sociedad que proclama la Constitución Política, se fundamenta en la Declaración de Principios del Gobierno de Chile del 11 de marzo de 1974. Y, a su vez, esta Declaración de Principios recoge y hace suyo el concepto cristiano sobre el hombre y la sociedad, porque es el que ha dado forma a la civilización occidental a la cual pertenecemos.

Ese concepto sostiene que el hombre está dotado de espiritualidad y por esa espiritualidad tenemos una dignidad y una trascendencia como seres humanos que nos hace ser superiores al Estado. Por eso, porque el hombre es superior al Estado, es que el Estado debe estar al servicio de la persona en definitiva, y no la persona al servicio del Estado”.

“Especial tercer aniversario Constitución Política de la República de Chile”. TVN, 1984.

CONCEPCIÓN DE PERSONA Y SOCIEDAD EN LA CONSTITUCIÓN

“Toda la doctrina sobre el Estado, la soberanía, la democracia, el gobierno y los derechos individuales y sociales, descansa en una concepción cristiana del hombre; en el reconocimiento de que el hombre encierra valores espirituales que están más allá del ordenamiento jurídico positivo”.

Actas Oficiales de la Comisión Constituyente, Vol. 1, Sesión 10ª, 25/10/1973.

NATURALEZA HUMANA Y BIEN COMÚN

“En efecto, el artículo primero de la Carta Fundamental vigente señala expresamente que “el Estado está al servicio de la persona humana y su finalidad es promover el bien común, para lo cual debe contribuir a crear las condiciones sociales que permitan a todos y a cada uno de los integrantes de la comunidad nacional su mayor realización espiritual y material posible, con pleno respeto a los derechos y garantías que esta Constitución establece.

Este precepto, que sirve de portada al texto constitucional, a la vez que preside toda su línea gruesa, sintetiza la real doctrina filosófica que lo guía, cual es la de reconocer que el ser humano está dotado de una dignidad espiritual y trascendente de la cual dimanan derechos inherentes a una naturaleza –anteriores y superiores al Estado- que éste puede y debe regular en su ejercicio, pero jamás desconocer o conculcar.

Tan inequívoco resulta lo expuesto que el artículo quinto de la misma Constitución establece, por vez primera en nuestra historia jurídica, que el ejercicio de la soberanía reconoce como límite el respeto a los derechos esenciales que emanan de la naturaleza humana”.

“Seguridad Nacional en la Constitución”, revista de Derecho Público (n°37-38), página 46, 1985.

NATURALEZA SOCIAL Y POLÍTICA DEL SER HUMANO

“Muy diversa es la perspectiva en que se aprecia la finalidad del Estado, si la sociedad se considera como una exigencia propia de la naturaleza humana, que ha sido siempre consubstancial a la existencia del hombre sobre la tierra.

El reconocimiento de dicha verdad, sitúa la sociabilidad y la politicidad como manifestaciones que pueden conceptualmente distinguirse, pero que jamás han podido tener existencia separada, ya que toda convivencia humana ha sido siempre determinada por el imperativo de organizarse.

Al ser tanto la entidad social como la política, realidades inherentes a la naturaleza humana, la finalidad de la sociedad estatal queda colocada en el terreno de la razón objetiva que es susceptible de ser desentrañada por la inteligencia, y no en el de una voluntad no sujeta a otra limitación que la de su propio capricho”.

Bases esenciales de la institucionalidad chilena. Comentario en torno al acta constitucional N°2, página 5, promulgada el 11 de septiembre de 1976.

CARÁCTER NECESARIO DE LA SOCIABILIDAD

“El hombre no puede alcanzar su fin último, que es su propia perfección. Su naturaleza sociable le exige agruparse con otros seres humanos, para satisfacer de este modo sus legítimos anhelos y necesidades.

La familia surge como la primera y básica sociedad humana, no sólo histórica sino conceptualmente. Se trata de una sociedad necesaria, de la cual el hombre no ha podido ni podrá prescindir jamás”.

Bases esenciales de la institucionalidad chilena. Comentario en torno al acta constitucional N°2, página 24, promulgada el 11 de septiembre de 1976.

LA NATURALEZA SOCIAL DEMANDA LA ORGANIZACIÓN POLÍTICA

“El hombre es por naturaleza sociable y requiere convivir con otros hombres para desarrollarse y perfeccionarse. Ahora, la convivencia necesita una organización para poder perdurar. La organización de esa convivencia entraña la dimensión política de ese ser humano. Sin embargo, el término “política” se usa habitualmente en un sentido más restringido, referido a la conducción del Estado”.

“Jaime Guzmán: de lo humano y lo político”, Revista Ercilla, semana del 23 al 29 de septiembre de 1987.

LA PERSONA COMO EJE DEL BIEN COMÚN

“Entendido, en cambio, el bien común como lo asume nuestra Constitución Política, es decir, como el conjunto de condiciones sociales que le permitan a todos y a cada uno de los integrantes de la comunidad nacional su mayor realización espiritual y material posible, cualquier enfoque totalitario se estrella de modo irremediable e insalvable.

Por el contrario, el referido concepto del bien común exige, en una lógica proyección de considerar a cada ser humano como el eje y destinatario de la convivencia organizada, el reconocer también a la familia como núcleo fundamental de la sociedad, y a los cuerpos intermedios a través de los cuales las personas buscan satisfacer diversos fines parciales de su existencia, como entes dotados de autonomía para perseguir sus propios objetivos específicos. Ambos principios se encuentran consagrados expresamente por el mismo artículo primero de la Carta Fundamental”.

“Seguridad Nacional en la Constitución”, en revista de Derecho Público (n°37-38), página 48, Santiago 1985.

NATURALEZA HUMANA Y FIN DEL ESTADO

“Ahora bien, del carácter objetivo y cognoscible de la naturaleza humana se deriva la posibilidad de formular el fin del Estado, y de la inmutabilidad de aquella fluye un cierto carácter permanente de éste”.

Bases esenciales de la institucionalidad chilena. Comentario en torno al acta constitucional N°2, página 5, promulgada el 11 de septiembre de 1976.

2) LIBERTAD

PARTICIPACIÓN EN DEFENSA DE UNA SOCIEDAD LIBRE

“Para que subsista una sociedad libre, resulta indispensable que el Estado sea conducido por quienes creen en aquella. Porque si el Estado cae en manos totalitarias, toda persona queda sometida a su férula aplastante y nadie puede desarrollarse con libertad.

En las grandes democracias occidentales la sociedad libre está garantizada por un cuadro social autosuficiente para preservarla de la amenaza totalitaria.

Pero en los países subdesarrollados, el afianzamiento de la sociedad libre requiere un compromiso político mucho mayor de cada uno de sus defensores. Para desarrollarse lo más al margen posible de la política, hay que asumir –paradojalmente– un lugar activo en la defensa cívica de una sociedad libre que lo posibilite”.

“Deber de cada uno”. La Tercera, 23 de noviembre de 1986.

LIBERTAD PERSONAL

“En primer término, la seguridad nacional exige respetar y potenciar la libertad de las personas, porque sólo una comunidad de hombres libres posee la vitalidad suficiente para tender con éxito hacia los objetivos que el Estado se proponga. La libertad es el fundamento de la responsabilidad moral y el motor del espíritu creativo y emprendedor en las más variadas manifestaciones de la cultura y del desarrollo económico-social. Es el alma y la impronta de las más nobles aventuras y de las más señeras realizaciones que registra la historia humana.

En ese sentido, la Constitución vigente, en su capítulo tercero, robustece en forma sustantiva los derechos y libertades de las personas, comparativamente con nuestro ordenamiento constitucional precedente”.

“Seguridad Nacional en la Constitución”, en revista de Derecho Público (n°37-38), página 51, 1985.

MORAL OBJETIVA Y LIBERTAD DE CONCIENCIA

“Subjetivizar la moral implica reemplazarla por el capricho, el egoísmo o el ansia de placer ilimitado para los sentidos. Sin duda, ello se disfraza con elegancia. Se dice que lo importante es ser “sincero” y actuar según la “propia conciencia”. Pero se olvida que esto tiene escaso valor si la conciencia ha sido relajada hasta no subordinarse a ninguna exigencia moral objetiva.

¿Qué argumento habría, en tal caso, para condenar éticamente el terrorismo, si éste se ejerce en nombre de un impulso “sincero” que nace de las “convicciones de conciencia” del terrorista?”.

“Los valores morales”. La Segunda, 13 de noviembre de 1981.

SOCIEDAD DE HOMBRES LIBRES

“La libertad no se limita al ámbito de las estructuras. En definitiva, ella se juega al interior de cada persona. Cierto es que la opresión totalitaria, las agresiones de la violencia o la marginalidad de la extrema pobreza constituyen lacras que atentan contra la plena libertad humana.

 

Pero también hay personas que abdican del ejercicio de su propia libertad. Son aquellas que se suman a las consignas, renunciando a reflexionar para formarse juicios propios y fundados frente a cada realidad. Son aquellas que se dejan cautivar por meras imágenes, en vez de discernir sobre los contenidos.

Sólo merece el apelativo de sociedad libre una sociedad de personas libres. Y ello exige que cada ser humano se rebele contra la masificación colectivista y se resuelva a ejercer integralmente su libertad”.

“Sociedad de hombres libres”. La Tercera, 25 de junio de 1989.

SOCIEDAD LIBRE Y ESTADO SUBSIDIARIO

“La revolución por alcanzar el control estatal se convierte así en una misión avasalladora, a cuyo desarrollo todo debe subordinarse. Eso explica que la política se mire como la dimensión central de la existencia humana, que todo lo absorbe. Se politiza así el deporte, incluyendo universidades, sindicatos y cualquiera otra expresión social.

La sociedad libre nace de la antítesis de tal enfoque. Ella reconoce la dignidad y trascendencia del hombre, que lo hace superior al Estado. Valora la familia como núcleo básico de la sociedad y de la proyección de cada ser humano. Reconoce en la coexistencia de muchas entidades de diversa naturaleza y respetadas en su autonomía para tender a sus fines específicos, la base de la estructura social. Y concibe al Estado en un carácter subsidiario y no absorbente de las actividades particulares. Por eso, el hombre libre anhela vivir, educar a sus hijos y estudiar o trabajar sin otras interferencias del Estado que las exigidas por el bien común”.

“Deber de cada uno”. La Tercera, 23 de noviembre de 1986.

DERECHOS HUMANOS Y DERECHOS CÍVICOS

“Es indudable que si consideramos como manifestaciones básicas de la libertad política a ciertos derechos humanos primarios, como el derecho a la vida, a la integridad de la persona, o a la libertad personal (habeas corpus), estamos en una esfera prioritaria de la libertad humana, que supera en importancia a cualquier otra del orden económico-social. Pero si en cambio referimos la libertad política a los derechos cívicos clásicos que configuran propiamente el régimen democrático de gobierno, la realidad cambia sustancialmente.

Todos los demócratas consideramos la vigencia de tales derechos políticos clásicos, como un elemento propio del modelo al cual aspiramos. Pero, a mi juicio, mucho más importante que ellos son ciertas libertades económico-sociales, como la de ejercer efectivamente el derecho a educar a los hijos; a resolver libremente sobre la propia afiliación gremial, sin que ello condicione la libertad de trabajo; a decidir en la administración de los propios fondos previsionales; a emprender una actividad económica sujeta en su éxito a reglas impersonales de eficiencia, o, en fin, a ver asegurado el respeto a su derecho de propiedad”.

“En torno al camino político”. Revista Ercilla, 13 de febrero de 1980.

LIBERTADES CIUDADANAS RECONOCIDAS EN LA CONSTITUCIÓN

“La carta de 1980 refuerza el derecho de los padres a educar a sus hijos y la libertad de enseñanza; las libertades de asociación y de trabajo, estableciendo -por primera vez en nuestra historia- la libertad sindical; el derecho a optar entre prestaciones de salud públicas o privadas y, en fin, todas las libertades económicas para emprender actividades empresariales privadas, con sólido respeto al derecho de propiedad y con sujeción a reglas objetivas y no a la discrecionalidad de omnipotentes funcionarios de los gobiernos de turno”.

“Restablecer o renovar”. Revista Ercilla, 9 de marzo de 1988.

NECESARIA UNIÓN ENTRE LIBERTAD POLÍTICA Y LIBERTAD ECONÓMICA

“La libertad política y la libertad económica-social sólo perduran en conjunto. Sin libertad política, siempre la libertad económica social será precaria, porque la amenaza del retorno al estatismo y a la discrecionalidad funcionaria estará más latente. A su vez, sin libertad económica-social, la libertad política carece de contenido real y se transforma en una entelequia hueca”.

“Jaime Guzmán: Libertades política y económica van juntas”. El Mercurio, 16 de julio de 1987.

MODERNIZACIÓN DEL ESTADO EN FUNCIÓN DE UNA SOCIEDAD LIBRE

“Considero que sin desconocer el papel activo que corresponde al Estado en una sociedad moderna, es imperioso asegurar la vigencia de un régimen de libertad, a través de profundas transformaciones en campos como el educacional, el laboral, el previsional y otros, tal como parece haberse empezado recientemente a realizar en el de la vivienda. Hay que adaptar la estructura social al esquema político y económico de una sociedad libre (…)”

“La creación de nuevos hábitos cívicos en Chile”, La Tercera, 21 de agosto de 1978.

LIBERTAD Y MODELO ECONÓMICO SOCIAL

“En efecto, se ha ensanchado la libertad para participar en la educación de los hijos; para ejercer la libertad de trabajo y sindicación; para tener injerencia en el uso de los propios fondos previsionales; para optar entre más variadas prestaciones de salud públicas y privadas; para elegir el consumo diario entre una creciente gama de productos y, en fin, para emprender actividades económicas sujetas en su resultado a reglas objetivas e impersonales, y no a la discrecionalidad funcionaria”.

“Sobre un concepto de cardenal”. La Segunda, 25 de septiembre de 1981.

LIBERTAD SOCIAL, FACTOR GRAVITANTE

“No pienso que ni la libertad política ni el sistema democrático sean un mero subproducto automático de la libertad económica, ya que tal reduccionismo de lo político a lo económico implicaría efectivamente acercarse a la errónea concepción del materialismo histórico, que en definitiva niega la libertad del hombre”.

“En torno al camino político”. Revista Ercilla, 13 de febrero de 1980.

DEMOCRACIA Y LIBERTAD

“(…) la democracia como forma de gobierno no es un fin en sí misma. Es sólo un medio para alcanzar la libertad, la seguridad y el progreso, de modo armonioso y simultáneo. La forma de gobierno es siempre sólo un instrumento para lograr una deseable forma de vida.

Cualquier régimen de gobierno respetuoso de la naturaleza humana es doctrinariamente legítimo, pero para que resulte operante en la finalidad de promover el bien común, exige la aceptación del pueblo como condición indispensable”.

Revista Realidad, Nº 1, junio 1979.

DIMENSIÓN DEL PODER DEL ESTADO

“Por eso es que al margen de todo atisbo de materialismo histórico reitero que estimo un supuesto esencial, para una futura democracia estable en Chile, que se reduzca el poder del Estado a sus debidas dimensiones, fortaleciendo la esfera de libertad económica y social de las personas. Y que el ejercicio de dichas libertades durante algunos años, conducente a su aprecio por una generación que todavía no las ha experimentado suficientemente, es condición previa para que la nueva democracia tenga en ella uno de los diques más eficaces contra todo intento estatista o totalitario”.

“En torno al camino político”. Revista Ercilla, 13 de febrero de 1980.

LIBERTAD DE PENSAMIENTO

“Pienso que nadie tiene derecho a ‘imponerles’ por fuerza a los demás su propio pensamiento. Los hombres son seres racionales, a los cuales hay que convencer y no someter. Lo único que creo que se debe imponer, por parte de la autoridad, es el respeto de todos a la ley, porque si no, se cae fatalmente en la inseguridad, el abuso y la anarquía”.

“’Momio’ pero hombre nuevo (aunque él se califica como independiente)”. Buen Domingo, Santiago, 23 de julio de 1972

LIBERTAD DE PRENSA

“La libertad de prensa es el mecanismo para hacer efectivo el derecho de los seres humanos a ser informados veraz, objetiva y oportunamente sobre el acontecer nacional e internacional, con respeto a la honra de las personas e incluso a su vida privada, salvo que en este último caso esté comprometido el interés público o nacional”.

“Los argumentos de Jaime Guzmán”. Entrevista en Revista Ercilla, 30 de junio de 1976.

LIBERTAD Y SEGURIDAD

“Libertad y seguridad personales se presentan, a veces, con una dinámica tensión de contrapuntos. Si la libertad se exagera hasta amenazar la legítima seguridad de terceros, aquélla deriva en libertinaje o anarquía. Y si la seguridad se excede hasta límites que constriñan la libertad creadora y las diversidades sociales inherentes a ella, se cae en la opresión o en la tiranía. Sin embargo, ello no quiere decir que libertad y seguridad sean conceptos antagónicos, sino al contrario, de estrecha interdependencia e indispensable armonía”.

“Seguridad Nacional en la Constitución de 1980. Intervención del abogado Jaime Guzmán con motivo del décimo aniversario de la Academia Nacional de Estudios Políticos y Estratégicos 18 de julio de 1985”

3) VIRTUDES

CONDUCTAS CÍVICAS

“Las leyes son como un cauce a través del que fluye el acontecer social, pero el agua que va dentro de ese cauce está constituida por las conductas de las personas.

De nada sirve una buena ley con malos hábitos cívicos. Como de nada sirve un muy buen cauce si el agua que lleva no existe (…).

Lo importante es que esta Constitución que ofrece un muy buen cauce para Chile, los chilenos aportemos nuestra propia cuota de hábitos cívicos sanos, de cordura, de responsabilidad y de sentido solidario en la construcción de un país que a todos nos pertenece”.

“Especial tercer aniversario Constitución Política de la República de Chile”. TVN, 1984.

FELICIDAD Y SENTIDO DEL DEBER

“Yo personalmente tengo un temperamento muy alegre y siempre he sido una persona muy alegre y nunca sentí obstáculos para esa alegría en el cumplimiento del deber. Yo creo que uno queda mucho más feliz después de un deber cumplido, que le haya exigido sacrificios, que no evitándose cumplir con el deber para evitarse sacrificios. Ese es el secreto de la felicidad; el más oculto, pero también el más duradero (…). Yo creo que el pasarlo mejor o peor es fruto de la circunstancia y en cierto modo toca una línea más superficial de la vida de una persona. A la postre uno no es más feliz o menos feliz porque lo haya pasado mejor o peor sino porque tenga una mayor convicción con la vida que está llevando y con los ideales que está sirviendo. En la medida que la persona sienta que está cumpliendo con su deber va sintiendo también una riqueza interior y una felicidad creciente. Una persona hueca por dentro puede pasarlo muy bien pero a la larga no es feliz”.

“Sobre el amor y la vida”. Clan Nº21, mayo de 1982.

LIBERTAD, ESFUERZO Y DEBER

“Al desplazarse el paternalismo estatal por la libre competencia, y desatarse las alas y energías creadoras de los chilenos, hemos sido colocados frente a un desafío que nos exige mayor disciplina, esfuerzo y eficiencia. Y todos estos elementos ayudan a formar un concepto del deber.

Claro está que ello no es más que un instrumento, al cual hay que darle un sentido superior. Porque incluso el deber por el deber puede ser una esclavitud carente de proyección ética. Pero en definitiva ésta sólo emana de valores espirituales y morales, cuyo fundamento es previo y superior a cualquier sistema político, económico o social.

Forjar y transmitir esos valores constituye la tarea más importante de un gobierno y de todos quienes tienen influencia conductora en cualquier plano social”.

“Primacía del testimonio espiritual”. La Segunda, Santiago, 22 de mayo de 1981

MOTIVACIÓN DE LOS PUEBLOS

“Los pueblos y los hombres, en definitiva, se mueven tras lo positivo sólo por impulsos morales, y éstos se nutren a su vez de ejemplos y testimonios”.

“4 de Septiembre de 1971: La democracia chilena sigue de pie”. PEC, Nº 417, 3 de septiembre de 1971.

ADVERSIDAD Y FUERZA INTERIOR

 

“La fuerza interior que nace del espíritu no se doblega jamás. Por el contrario, la adversidad es la fragua donde se forjan aquellas personalidades y movimientos capaces de calar profundo en la vida de los pueblos”.

“Jaime Guzmán reiteró la intención del movimiento de ser un partido político. La UDI por el Sí reconoció ayer el triunfo de la opción No en el plebiscito”. La Época, 7 de octubre de 1988.

RAZÓN Y SENTIMIENTOS

“Creo profundamente en el valor de los sentimientos. Creo que la bondad es la fuente de muchas virtudes. Creo en el valor de la emoción. El ser humano debe combinar la razón y los sentimientos. Sin sentimientos es un robot, un autómata. Y sin racionalidad es un sentimentaloide o una persona expuesta a que sus sentimientos deriven en resultados distintos a lo que aspira”.

“Jaime Guzmán Errázuriz se confiesa ‘Cerebro’ del Gobierno”. Revista del Sábado, Las Últimas Noticias, 27 de mayo de 1978.

ACTITUD CRISTIANA FRENTE A LA POBREZA

“(…) la actitud cristiana frente a la pobreza no puede reducirse a una cuestión de estructuras político-sociales, ya que jamás ningún diseño de éstas será suficiente para solucionar el problema.

Lo importante es advertir que eso no agota –y ni siquiera domina– el enfoque cristiano del tema. Cualquier contexto social dejará siempre un amplio espacio –convertido en exigencia ética– para el ejercicio de la caridad a nivel interpersonal. Y sólo de la práctica de dicha virtud con el prójimo –o ´próximo´– brotará la auténtica justicia social.

Caridad cristiana que no se confunde con la beneficencia, sino que trasciende a ésta por el amor. Caridad cristiana que no se limita a la ayuda material, sino que incluye la espiritual porque, como también sor Teresa lo ha recordado, los ricos en dinero son, a veces, pobres en dolor, soledad o desorientación”.

“Mensajera del cielo”. La Segunda, 17 de septiembre de 1982.

AMOR

“¿Qué significa amor para usted?

Esencialmente, buscar el bien de la persona que se quiere. Enseguida, también sentir afecto. El amor es uno de los motores más nobles de la existencia humana. Desgraciadamente a veces también el hombre se mueve por bajas pasiones, como son el odio y la envidia. Hay que tratar de que prevalezcan el amor y el sentido del deber por sobre el odio, la envidia, el rencor y la venganza. No concibo en la lucha ideológica ninguno de estos sentimientos personales negativos”.

“Jaime Guzmán Errázuriz se confiesa ‘Cerebro’ del Gobierno”. Revista del Sábado, Las Últimas Noticias, 27 de mayo de 1978.

AMOR Y VOLUNTAD DE LUCHA

“Amor y lucha son siempre inseparables... Lo sabe cada padre o madre que debe proteger y educar a sus hijos, combatiendo todo lo que pueda dañarlos. Lo sabe cada joven que ve en su pareja el anhelo de formar un nuevo hogar, estando dispuesto a jugársela por entero contra cualquier escollo que se interponga en esa ilusión. Lo sabe cada hombre y cada mujer que quiere surgir con su propio esfuerzo, ya que ello exige grandes y perseverantes sacrificios.

El amor sin voluntad de lucha, jamás logra sus objetivos. Y la lucha sin amor, es el mero impulso del egoísmo, incluso del odio”.

Discurso en la campaña presidencial de Hernán Büchi, Estadio Nacional, 12 de octubre de 1989

FRIVOLIDAD Y VALORES

“Pienso que hoy existe la tendencia de muchos medios de comunicación social a exaltar como ejemplos a personas o conductas que nada tienen de ejemplar. La frivolidad, la búsqueda del éxito exterior, del placer a cualquier precio, de la fama como objetivo de la existencia, son una distorsión completa de la verdadera escala de valores que debe guiar la conducta del ser humano. A mi juicio, la vida debe ser entendida como una misión de servicio, en el cumplimiento de un deber, lo que impone siempre renunciamientos a los propios apetitos y deseos. De lo contrario, se termina confundiendo la felicidad con el capricho. La única verdadera felicidad es la que se conquista a través de la purificación del renunciamiento implícito en todo cumplimiento permanente del deber, y en la riqueza de la vida interior que de ahí surge”.

“Entrevista a Jaime Guzmán E.: el camino hacia la nueva institucionalidad es arduo”. El Sur de Concepción, 19 de abril de 1983.

TEMOR AL RIDÍCULO

“El temor a la risa y al ridículo yo creo que es una de las armas más delicadas frente a la cual realmente tenemos que estar preparados para enfrentarla y luchar”.

Charla sobre moral a oficiales de las Fuerzas Armadas, Escuela militar.

DINERO

“Es un instrumento peligroso, que puede llevar a perder la escala de valores de un ser humano y hacerlo caer en una primacía de lo material sobre lo espiritual. Soy partidario de tener el dinero estrictamente suficiente para desarrollar normalmente una vida austera, dentro del nivel al que cada cual pertenece. Mi deseo para todos los chilenos es que a nadie le falte el dinero para satisfacer sus aspiraciones razonables. Pero a nadie le aconsejaría ser muy rico. Esto no quiere decir que yo crea que la riqueza es mala en sí. Puede ser fuente de grandes obras de bien, pero es peligroso”.

“Jaime Guzmán Errázuriz se confiesa: ‘Cerebro’ del Gobierno”. Revista del Sábado, Las Últimas Noticias, 27 de mayo de 1978.

CONSUMISMO

“El consumismo no está en la abundancia de las vitrinas sino en la carencia de los espíritus”.

“Cómo y qué debe ser la transición”. Revista Qué Pasa, 12 de agosto de 1982.

HEROÍSMO, MARTIRIO Y FALLA MORAL

“Hay personas para las cuales el límite entre el heroísmo o el martirio, por una parte, y la falla moral, por la otra, se estrecha hasta hacerse imposible. La mayoría de los seres humanos viven gran parte de sus vidas en una amplia zona intermedia que hay entre ambas, pero la Providencia permite, exige o impone muchas veces a un ser humano que ese cerco se estreche y la persona se encuentre obligada a enfrentar una disyuntiva en la cual no queda sino la falla moral, por una parte, o el heroísmo, por la otra, en ese caso tiene que optar por el heroísmo, el martirio o lo que sea.

De manera (agrega el señor Guzmán), que la gravedad o tragedia que sigue a la observancia de la ley moral nunca puede invocarse como elemento para sustraer a alguien de la obligación de cumplirla”.

“Actas oficiales de la Comisión Constituyente”. Sesión 87ª, celebrada el 14 de noviembre de 1974, página 14.

LIDERAZGO Y CONVICCIÓN

“El líder sabe que tiene algo que decir, porque está convencido de ello, de su verdad, y de la necesidad de comunicarlo racionalmente a los demás. En esta tarea, hay que estar incluso dispuesto a arrostrar la ingrata misión de disgustar ”.

“Algo peor que el triunfo de Allende. La democracia chilena sin liderato”. P.E.C., Santiago, Nº375, 30 de octubre de 1970

FORTALEZA FRENTE A LAS CRISIS

“Pienso que las crisis son precisamente las coyunturas que mejor ponen a prueba a hombres, pueblos e instituciones. Allí es donde más contrasta la debilidad de quienes se dejan arrastrar por la crisis, y el valor de aquellos que son capaces de erguirse sobre sus borrascas y conducir los acontecimientos hacia destinos rectificadores”.

“Soluciones versus tremendismo y péndulo”. La Segunda, Santiago, 28 de enero de 1983

DEFENSA DE CONVICCIONES

“…resulta indispensable defender las propias convicciones con valentía, sin dejarse seducir por lo que aparezca como opinión mayoritaria”.

“Hora de convicciones”. La Tercera, Santiago, 23 de octubre de 1988

RECTITUD MORAL

“Para mí no es importante el ser o no inteligente.

Creo que tiene mucho más valor poseer una rectitud moral y gozar de una cordialidad en el plano afectivo. A estas dos cualidades le agregaría la importancia de tener un cierto grado de sensibilidad, imaginación y sentido del humor”.

“¿Es importante ser inteligente?”, 1975

4) VOCACIÓN

VOCACIÓN PERSONAL

“Pienso que es indispensable destacar la vocación personal, como un llamado específico y diferente que Dios hace a cada ser humano, y que se manifiesta en sus gustos y aptitudes, realidades ambas muy ligadas. Pero resulta quizás aún más imperioso insistir, además, en que la vocación se marca y se descubre a través de las circunstancias que a cada cual le toca vivir.

Sie haben die kostenlose Leseprobe beendet. Möchten Sie mehr lesen?