Enseñanza de las ciencias para una nueva cultura docente

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En un sentido aún más complejo, pensamos que el camino de la formación científica requiere necesariamente una argumentación didáctica conectada al análisis de los diversos factores que han condicionado, sino determinado, las maneras en que se aprende a enseñar y a divulgar el conocimiento científico, en distintas épocas y culturas. En su libro La comprensión humana, Toulmin (1977) instala una discusión interesante acerca del “cambio conceptual” y del “cambio científico” utilizando como fundamento los “problemas a los que se enfrentan los científicos’ identificando tres métodos que permiten discriminarlos y resolverlos: Estos modos o métodos serían: (a) Mejorar la representación o los modelos teóricos (Pensamiento, P), (b) Introducir nuevos sistemas de comunicación (Lenguaje, L) y (c) Refinar los métodos experimentales en los fenómenos (Experiencia, E). En la Tabla 1, sintetizo estas ideas a continuación6:


Tabla 1: Los planos del pensamiento cfico y su vinculación con los problemas de la ciencia
DIMENSIONES TEÓRICO-DIDÁCTICASCategoríasDescriptores estructurantesFinalidades didácticas
METODOLOGÍA CIENTÍFICA PARA RESOLVER UN PROBLEMA(Toulmin, 1977)PPensamiento(pensar)Teorías de la ciencia, enunciados, leyes, fórmulas, algoritmos, nociones científicas, definiciones, conceptos.Mejorar las representaciones teóricas de la ciencia. Orientada a la modelización.
LLenguaje(comunicar)Hablar, escribir, narrar un experimento, explicar, argumentar, justificar, nuevas reglas del juego.Mejorar o ajustar los lenguajes de la ciencia. Orientada a la comunicación científica. Puede explicitar una CPC.
EExperiencia(actuar)Instrumentos, experimentos, mediciones, registros, cálculos, filtrar, destilar, purificar.Innovar las actividades experimentales. Orientada a la actividad del o los sujetos, a los procedimientos.
PLANOS DEL PENSAMIENTO CIENTÍFICO(Labarrere y Quintanilla, 2002)I-OInstrumental u operativoCálculos, fórmulas, signos definiciones, mediciones, gráficos, pesar, dibujar, anotar, registrar, etc.Énfasis en la actividad (sin sujeto). Énfasis en objetos, acciones, materiales.
P-SPersonal o SignificativoProceso de pensamiento, reto intelectual o actividad dirigida al estudiante, a una persona.Direccionada al sujeto que aprende (yo, tú, él/ella).Intención de abordar un problema.
R-SRelacional o socialProceso de pensamiento, reto intelectual o actividad dirigida al grupo. Vinculaciones en contexto implícitas o explícitas.Orientada al sujeto colectivo (nosotros, ellos).Intención de abordar un problema cooperativamente.

En la Tabla 2, entrego algunos ejemplos que permiten al profesor identificar las relaciones entre los planos del pensamiento y la actividad científica que orienta la tarea escolar y que puede utilizarse como instrumento para “elaborar preguntas con sentido competencial o bien orientar la tarea a un nivel especifico de resolución de manera análoga a cómo lo resuelve la comunidad científica” (Tolumin, 1977). Es evidente que pueden existir matices en la manera que pensamos una pregunta o una actividad porque los modelos teóricos que construimos están determinados a la vez por la manera en que los hemos aprendido.

Entonces ¿Cómo enseñar al estudiantado a enfrentarse a resolver un problema y promover, por ejemplo, la argumentación o la explicación científica? ¿Cómo evaluar (no medir) el desarrollo competencial en el estudiantado? En la actualidad existe bastante consenso respecto a que la enseñanza de la resolución de problemas científicos en el aula es uno de los medios principales para el desarrollo del “pensar teórico”, así como para promover y desarrollar CPC específicos como argumentar, explicar, justificar. Ello propicia y favorece una “cultura científica escolar” en el alumnado, generando así mismo ambientes de aprendizaje creadores y ricos en densidad metacognitiva (Angulo, 2012). El tránsito al pensamiento científico y la cultura en este dominio del conocimiento, como aspectos primarios a atender en la transposición didáctica, marca una toma de conciencia de que el aprendizaje orientado básicamente al plano instrumental-operativo y teórico-conceptual de la ciencia resultan insuficientes, para que el alumnado alcance una verdadera competencia en la comprensión de los fenómenos científicos. En este sentido, también se reconoce la necesidad de trascender la representación del estudiantado como sujeto del aprendizaje y se comienza a considerar un “sujeto colectivo”, es decir el grupo que trabaja en equipo y actúa como comunidad generadora de conocimientos y procesos básicos a partir de los cuales se debe llevar a cabo la educación científica del estudiantado (plano personal, plano social). Bajo esta perspectiva, resulta evidente la necesidad de orientar oportuna e intencionadamente al estudiantado hacia ámbitos más amplios, y a la vez profundos, acerca de la naturaleza de la ciencia, su método y lenguajes. En esta dirección (consciente y por tanto intencionada teóricamente), el enfrentamiento y resolución de problemas científicos desempeña una función clave, puesto que nos interesa potenciar un marco lógico que contribuya a una explicación científica escolar teóricamente fundamentada y autorregulada por los alumnos y el ejercicio profesional del docente. Sin embargo, estamos seguros de que la cuestión principal radica en trascender la simple preparación de los estudiantes para enfrentar y solucionar problemas (medir, pesar, calcular, definir), y pasar a un contexto de actividad científica escolar más interesante y desafiante para el alumnado (Tabla 2). Para ello, resulta también urgente comprender que la evaluación de aprendizajes es un proceso de desarrollo del sujeto que configura realidades y modeliza lo que aprende. No es difícil percibir que alrededor de la evaluación formal e informal giran prácticas pedagógicas normativas, pero, sobre todo, sistemas de creencias y concepciones epistemológicas del profesorado de ciencia que son resistentes al cambio conceptual epistemológico, pedagógico y didáctico (Quintanilla, 2012).


Tabla 2: Énfasis en la orientación de la actividad científica escolar
Ejemplos de problemas científicos escolaresPlanos del pensamiento científicoMetodología para abordar un problema científico
I-OP-SR-SP L E
Explica cómo prepararías una solución acuosa en ambiente ácidoxxxxx
¿Cómo explicarías la noción de partícula a partir de una disolución de sacarosa en agua?xxxx
Describe qué características biológicas tienen en común y que diferencia una bacteria de un virusxxxx
¿Cuáles son los métodos más polémicos en términos bioéticos de la experimentación con transgénicos en comunidades indígenas? Debatan en grupoxxxx
Grafica la pendiente que según tú explica el ciclo vital y metabolismo de una bacteria heterótrofaxxx
¿Cómo explicas la formación de caries a partir de una alimentación no balanceada?
¿Qué significa X + 3 = 6xx
Definir masaxxx
¿Qué es el Geocentrismo?xx
Representa la combustión del anhidrido carbónico en una reacción químicaxxx
Dibuja una célula eucarionte e identifica su estructura fundamentalxxx

ORIENTACIONES PARA PROMOVER CPC

Hace ya algún tiempo hemos planteado en otras publicaciones e innovaciones con docentes en ejercicio, algunas directrices metodológicas para identificar, caracterizar y promover competencias científicas en el aula mediante el enfrentamiento a la resolución de problemas científicos específicos (Quintanilla et al., 2012; Camacho y Quintanilla, 2008). Como lo he señalado también en los párrafos anteriores, el movimiento del sujeto que aprende por los planos de análisis o espacios de la resolución de un problema científico determinado, puede tener lugar en uno solo de ellos o como tránsito de uno a otro; de manera que si, a partir de los fragmentos del discurso, o de la observación de la “actividad científica” de resolución esta incluye entre otros, los criterios de análisis del problema, los modelos teóricos involucrados y los mecanismos y estrategias cognitivas que anticipan la acción de resolución y su sentido (Labarrere y Quintanilla, 2002). Esto es muy importante, porque supone orientar la autorregulación de los procesos de aprendizaje científico y del control de los planos del desarrollo por parte del sujeto que aprende de manera intencionada para abordarlos y desarrollar competencias científicas escolares (CCE).

A continuación, en la Tabla 3 y con base en las orientaciones teóricas que he desarrollado y profundizado discretamente hasta ahora, propongo al profesorado una “ruta didáctica para su plan de clases” en tres etapas secuenciadas metodológicamente (inicial, intermedia y de cierre), que colabore en promover y desarrollar competencias de pensamiento científico (CPC) en el estudiantado, señalando las actividades del profesorado, preguntas orientadoras y finalidades en cada etapa de las actividades.

 

Tabla 3: Orientaciones para promover CPC en el estudiantado
EtapaActividades del profesoradoPreguntas orientadorasFinalidades / objetivos
InicialIdentificación de problemas científicos y comunicación de significados.¿Qué modelo teórico quiero enseñar?¿Qué quiero preguntar?¿Quiénes van a aprender?¿Qué planos del pensamiento voy a privilegiar?• Identificar un “problema científico” (concepto-idea-pregunta problematizadora)• Seleccionar la tipología o dimensión del problema (conceptual, procedimental, actitudinal)• Identificar la teoría científica que subyace• Discriminar el nivel en que se enseña ese contenido problemático y los supuestos de los alumnos/destinatarios• Identificar “el plano de desarrollo” en que está formulado inicialmente el problema (instrumental, personal, comunicativo).
IntermediaProblematización e identificación de categorías¿Qué CPC voy a promover? ¿Cómo voy a trabajar con mis estudiantes?¿Cómo les voy a enseñar a identificar los planos? ¿Qué ejemplos me parecen más interesantes?• Vincular el tipo de problema con alguna competencia específica que se quiera desarrollar.• Comunicar a los alumnos (o consensuar con ellos) el tipo de competencia científica y sugerencia para resolver el problema que se ha enunciado.• Enseñar a los alumnos a identificar el plano de análisis por donde se puede “movilizar el problema científico”.• Identificar con los alumnos el marco teórico del problema, el marco procedimental y los recursos que posibilitan enfrentarse a resolver el problema (algorítmicos y heurísticos).
De cierreEvaluación de la experiencia con los estudiantes• ¿Qué reflexiones potenció el enfrentamiento al problema? ¿En qué planos del desarrollo lo situamos?• ¿Cuáles fueron los criterios para evaluar el problema científico y cómo enfrentarlo? ¿Cómo los identificamos?• ¿Cuáles fueron las principales dificultades del análisis? ¿Cómo las identificamos y las superamos?• ¿Qué competencias científicas desarrollamos/aprendimos?

Una estrategia que ha sido ampliamente investigada y trabajada por nosotros es el uso de la historia de la ciencia en la promoción de CPC, lo que hemos compartido con la comunidad internacional en diversas publicaciones (Quintanilla, Daza y Cabrera, 2014; García, Izquierdo, Quintanilla, Adúriz-Bravo, 2016; Quintanilla et al., 2017). Un ejemplo publicado ya hace algunos años nos permite orientar competencialmente la enseñanza de la noción de vacío a partir de un análisis histórico (Camacho y Quintanilla, 2008). En el siglo XVII en Alemania, Otto von Guericke, durante una demostración que llevó a cabo en Magdeburgo, adaptó a un tonel de madera una bomba de agua, lo llenó de agua y cerró. Luego con la ayuda de varios hombres procedió a sacar el agua y dado a que el bombeo se había prolongado después de vaciado el tonel, se ocasionó la precipitación del aire a través de los poros de la madera. Este experimento motivó a Guericke a uno nuevo: la fabricación de una esfera de cobre a la que se le podía colocar una bomba, esta vez omitió el agua y bombeó directamente el aire. Cuando había extraído aparentemente todo el aire, la esfera se deformó de manera repentina (sufrió un efecto de compresión) debido a la presión atmosférica, así variando las condiciones iba creando nuevas situaciones que le permitían dar cuenta del vacío. (Camacho y Quintanilla, 2008). Sugiero leer el artículo para comprender la propuesta metodológica adaptada y seleccionar razonablemente las actividades de aprendizaje que se indican en la Tabla 4:


Tabla 4. Directrices para promover competencias científicas cognitivo lingüísticas a partir del episodio histórico seleccionado: La bomba de vacío. (Camacho y Quintanilla, 2008)
Identificación de problemas científicos
Ejemplo: ¿Cuáles son las sustancias que componen el aire?
1. Seleccionar tipo de conocimiento científico utilizando la historia de la ciencia como estrategia de promoción de aprendizaje competencialCONCEPTUALCombustión, gases, elemento, compuesto y mezcla. Teorías disponibles en la época
PROCEDIMENTALUso de la bomba de vacío y otros instrumentos científicos en el contexto del episodio histórico.
ACTITUDINALAcuerdos, pactos metodológicos, juicios, valores en disputa y discusiones de los químicos y científicos/as de la época.
2. Identificar la teoría científica que subyace (¿qué modelo teórico se quiere enseñar?)Cambio químico. Teoría del flogisto de Sthal. Teoría de la combustión de Lavoisier. Concepto de elemento de Boyle. Estudio de los gases en el siglo. XVIII.
3. Proponer preguntas interesantes vinculadas con la noción científica y el episodio histórico estudiado. (Ver Camacho y Quintanilla, 2008) e identificar planos del pensamiento en cada una de ellas y la orientación al estudiantado en términos científicos (pensamiento, lenguaje, experiencia)1. De acuerdo con el episodio histórico estudiado ¿Cómo interpretaban Priestley y Lavoisier el fenómeno de la producción de un nuevo aire?2. ¿Qué criterios utilizó Priestley para hablar de aire desflogistisado?3. ¿Qué prácticas experimentales utilizarías para dar cuenta del “nuevo aire” en la bomba que utilizó Priestley o la de Lavoisier?4. ¿Hubo alguna incidencia de la propuesta de Scheele, en la discusión entre Lavoisier y Priestley, qué crees y por qué?5. ¿Crees que si Boyle hubiese trabajado en la misma situación, en la misma época y con la bomba que construyó, hubiera concluido algo similar a Priestley o Lavoisier?6. ¿Qué piensas acerca de que la nacionalidad puede influir en las decisiones científicas? (Priestley, inglés; Lavoisier francés).7. ¿Cómo definirías el oxígeno y el aire desflogistisado?8. ¿Cómo relacionas el problema de la descomposición del aire con situaciones cotidianas?
Problematizar competencialmente la actividad científica escolar
ArgumentaciónLos químicos ingleses estaban equivocados. No existía aire desflogisticado, sino oxígeno.
ExplicaciónLavoisier vio oxígeno donde Priestley había visto aire desflogistisado.
Descripción¿Cuáles eran las ideas de Priestley y de Lavoisier acerca de la descomposición del aire?
Justificación¿Por qué Priestley habla de aire desflogisticado y Lavoisier de oxígeno?
Explicación¿Cómo explicas las ideas de Priestley o de Lavoisier acerca de la descomposición del aire?
Descripción¿Cuáles fueron los recursos (conceptuales e instrumentales); los procedimientos y las estrategias que permitieron a Priestley y Lavoisier estudiar el aire?
Evaluación de la experiencia con los y las estudiantes
• ¿Qué reflexiones hemos aprendido de este episodio histórico?• ¿Cómo se construye el conocimiento científico?• ¿En qué planos de desarrollo lo situamos?• ¿Cuáles fueron los criterios para evaluar el problema científico y cómo enfrentamos el desafío de aprenderlo? ¿Cuáles fueron las principales dificultades de análisis?• ¿Cómo las identificamos y las superamos?• ¿Qué competencias científicas desarrollamos y aprendimos?• ¿Qué valor tiene la historia de la ciencia para aprender química?
Camacho y Quintanilla (2008). Adaptado.

ALGUNAS REFLEXIONES FINALES

Las tendencias internacionales actuales en investigación e innovación acerca de la enseñanza, el aprendizaje, la evaluación y la promoción de habilidades cognitivo-lingüísticas muestran que así como el estudiantado llega a las clases de ciencia con ideas personales, respecto a los conceptos y los fenómenos, el profesorado de ciencias especializado o no también desarrolla sus propias concepciones frente a la ciencia, su enseñanza, evaluación y aprendizaje de los diferentes contenidos específicos. Durante la formación inicial y continua, dichas visiones raramente son consideradas y en consecuencia, no se le prepara para asumir puntos de vista críticos frente al saber erudito o conocimiento científico formal y mucho menos, frente a su actuación docente, lo cual sería posible si durante los procesos de desarrollo profesional hubiese ambientes y condiciones permanentes para la reflexión, la interacción social y la regulación de aprendizajes de manera continua y sistemática favoreciendo la comunicación de la ciencia en contextos desafiantes intelectualmente. Donde, como lo he planteado en este capítulo, el lenguaje, las emociones, los valores, la cultura de cada uno y el pensamiento teórico tienen una importancia relevante. En este orden de ideas, las investigaciones de los últimos años enfatizan la relación entre la metacognición y aprender a enseñar para el logro de competencias de pensamiento científico de nivel superior, pues se argumenta que la metacognición es central para promover los cambios apropiados en el desarrollo del profesorado, no solo en lo relativo a sus ideas acerca de la enseñanza y el aprendizaje, sino también acerca del contenido de la disciplina, sus habilidades docentes y los fundamentos epistemológicos básicos que debe dominar y que deben ser coherentes con sus orientaciones y prácticas de aula que promuevan el desarrollo de dichas competencias científicas en sus estudiantes, particularmente hoy en un mundo perturbado, convulsionado e incierto donde aprender ciencia es también un derecho de todas y todos los ciudadanos libre pensadores/as.

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